#12818
Javier Oltra
Participante

Mi opinión al respecto es que hay la mejor manera de evaluar la eficacia de una intervención es identificando los objetivos que se quieren alcanzar y las medidas concretas asociadas a esos objetivos. Como comenta muy acertadamente Laiene, un objetivo abstracto (volver al trabajo) no es útil si no se identifica con claridad el objetivo. Una vez identificado el objetivo concreto, creo que hay que utilizar medidas relacionadas con ese objetivo. Por ejemplo, el tiempo que tarda en realizar una tarea, la cantidad de errores que comente, la cantidad de ayudas que necesita, la cantidad de tareas que puede realizar de manera simultánea, etc. Pongamos por ejemplo una persona que trabaja en un banco. Con suerte puede volver a su puesto de trabajo tras el daño cerebral, pero el tipo y rango de dificultades puede ser muy amplio. Por tanto, es importante identificar cuánto tiempo necesita para realizar una operación matemática, cuántas ayudas necesita para calcular valores (quizá necesite tener chuletas que consultar frecuentemente o una calculadora), cuántas operaciones puede realizar sin perder la atención en la tarea (quizá habría que modificar su entorno para que no reciba llamadas mientras está realizando una operación bancaria), etc. Por tanto, creo que hay que identificar objetivos concretos y evaluarlos mediante medidas relacionadas con esa tarea concreta. Por supuesto, no apoyo el uso de puntuaciones en tests cognitivos como medida de la eficacia.